Cedo hoy la página a mi buen amigo Lluis, recien llegado de la Argentina y residente temporal en mis 29 m2
Xx
“Mostré mi obra maesta a las personas mayores y les pregunté si mi dibujo les austaba. Me contestaron: “¿por qué habrá que asustarme un sombrero?”. Mi dibujo no representaba un sombrero. Representaba una serpiente boa que digería un elefante...”
Muchos recordareis este fragmento de El Principito y sus primeras láminas dibujadas por el própio Saint-Exupery, donde muestra cómo la mágia de la imaginación permite ver aquello que no ya pueden los que la perdieron con la edad. Pues bien, de mi viaje por Argentina en julio traje una tercera versión de lo que podría representar esta famosa silueta. Un gorro? una boa? No, una isla. La isla de los pájaros, situada en el parque nacional de Peninsula Valdés, en la Patagonia, y su parecido con el dibujo de Saint-Exupery es realmente tremendo. Al acercarme en el coche, encontré familiar la silueta del islote (curiosamente me habia comprado una camiseta en Buenos Aires con los estos mismos dibujos de Saint-Exupery estampados) pero me hizo caer en la cuenta una guardabosque que, mirando al islote con una sonrisa en la cara, me preguntó: ¿alguna vez leíste El Principito?
El debate siguiente fue: ¿es casualidad o Saint-Exupery se inspiró en ella? Dejadme que exponga un par de datos que podrían apoyar la segunda tesis. Antoine vivió, en efecto, en la Argentina en los años 20, destinado como manager de la compañia Aeropost-Argentina. Sus vuelos por la Patagonia (y por la zona de Chebub) fueron frecuentes en su misión de desarrollar nuevas rutas aereas para la compañía y, seguramente en homenaje a ello, le pusieron su nombre a un monte de los Andes.
Sin embargo, las fechas no coinciden. En esa época Saint-Exupery está trabajando en su Vuelo Nocturno y no fue décadas después que publicó El Principito. ¿Recordaría la silueta de la isla tanto tiempo?
Lluis
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“Mostré mi obra maesta a las personas mayores y les pregunté si mi dibujo les austaba. Me contestaron: “¿por qué habrá que asustarme un sombrero?”. Mi dibujo no representaba un sombrero. Representaba una serpiente boa que digería un elefante...”Muchos recordareis este fragmento de El Principito y sus primeras láminas dibujadas por el própio Saint-Exupery, donde muestra cómo la mágia de la imaginación permite ver aquello que no ya pueden los que la perdieron con la edad. Pues bien, de mi viaje por Argentina en julio traje una tercera versión de lo que podría representar esta famosa silueta. Un gorro? una boa? No, una isla. La isla de los pájaros, situada en el parque nacional de Peninsula Valdés, en la Patagonia, y su parecido con el dibujo de Saint-Exupery es realmente tremendo. Al acercarme en el coche, encontré familiar la silueta del islote (curiosamente me habia comprado una camiseta en Buenos Aires con los estos mismos dibujos de Saint-Exupery estampados) pero me hizo caer en la cuenta una guardabosque que, mirando al islote con una sonrisa en la cara, me preguntó: ¿alguna vez leíste El Principito?
El debate siguiente fue: ¿es casualidad o Saint-Exupery se inspiró en ella? Dejadme que exponga un par de datos que podrían apoyar la segunda tesis. Antoine vivió, en efecto, en la Argentina en los años 20, destinado como manager de la compañia Aeropost-Argentina. Sus vuelos por la Patagonia (y por la zona de Chebub) fueron frecuentes en su misión de desarrollar nuevas rutas aereas para la compañía y, seguramente en homenaje a ello, le pusieron su nombre a un monte de los Andes.
Sin embargo, las fechas no coinciden. En esa época Saint-Exupery está trabajando en su Vuelo Nocturno y no fue décadas después que publicó El Principito. ¿Recordaría la silueta de la isla tanto tiempo?
Lluis